Un grupo de vecinos se reúne los sábados, bajo el nombre “Sí al espacio público en el golf”, para rechazar la construcción de edificios en parte – 10 hectáreas – del Campo Público de Golf de Villa Adelina. Con la consigna “100% verde”, se oponen al proyecto anunciado por Gustavo Posse en marzo de este año. Durante la última jornada decidieron convocar a una caravana de concientización, el viernes 25 de mayo.
Alejandra García, una de las asistentes a la asamblea, contó a Guía de Noticias que “aunque parezca mentira hay muchos vecinos que no están al tanto de lo que sucede, ni saben que el golf es de acceso gratuito, por eso tratamos de informar a todos”.
El predio pertenece a Nación y es controlado por la AABE, Agencia Administradora de Bienes del Estado, pero para llevar a cabo los cambios, se necesita una modificación del código urbanístico local. Contra eso se movilizará la agrupación vecinal: “Vamos a recorrer las calles con banderas, a lo largo de la caravana va a haber puestos y vamos a repartir volantes, concientizar y protestar”, adelantó García.
Fabián Gaggino, otro de los vecinos pertenecientes a la agrupación, dijo en diálogo con este portal, “nosotros lo sabemos bien, metro cuadrado que se pierde no se recupera más”, y agregó que “Villa Adelina es uno de los barrios del municipio con menos espacio verde, no queremos que se pierda más”.
Otro de los puntos en conflicto es el barrio Stella Maris, que se encuentra detrás del golf y actualmente es ocupado por las Fuerzas Armadas. Al respecto, García sostuvo que “ellos están dentro de los perjudicados y lo han manifestado, pero no pueden hacerlo público porque es una decisión del Estado nacional y el Presidente es comandante en jefe de la fuerza”.
Por el momento, el proyecto avanza, a pesar de que en la reunión informativa llevada a cabo el 7 de abril hubo una masiva concurrencia que se opuso de forma unánime. El argumento de la AABE es que el predio “es obsoleto y no cumple ninguna función”, en cambio, con la iniciativa en marcha aseguran que “se optimizarán los espacios, crecerá la conectividad del barrio y habrá un progreso económico”.
Gaggino se mostró confiado con los efectos de la organización popular y destacó que “cuando empezamos a movilizarnos bajaron la intensidad de la exposición, antes lo promocionaban y ahora lo hacen por abajo”, a la vez, aclaro que “nosotros no pertenecemos todos a un partido político, somos un colectivo de vecinos heterogéneo en cuanto a ideas políticas y partidarias, lo que nos une es el 100% verde”.
La suerte del proyecto se definirá en el Concejo Deliberante, donde el oficialismo cuenta con 12 de las 24 bancas; las diferentes vertientes del justicialismo, que ya se expresaron en contra, con 7, y ConVocación por San Isidro, que aún no hizo trascender su postura, con 5. Es decir que la voluntad del partido vecinalista será clave para aceptar o rechazar la propuesta.
