Terminó la reparación integral del Puente Lebensohn y en ese marco, la gobernadora de Buenos Aires, María Eugenia Vidal, y el intendente Ramiro Tagliaferro recorrieron el renovado viaducto de 700 metros de largo, ubicado en el límite de Castelar y Morón, que ya quedó abierto para los 28 mil vehículos que lo cruzan a diario.
“Era una obra muy necesaria, en un puente clave para el tránsito en Morón. Los vecinos nos hablaban de paredes que temblaban cuando pasaba un camión, de poca seguridad vial en la zona, y todo eso hoy cambió”, expresó el jefe comunal durante la caminata por el lugar.
En este sentido, después de décadas sin las mejoras necesarias y tras numerosos reclamos, la obra abarcó desde la rehabilitación de la estructura hasta una nueva carpeta de rodamiento, sistema de desagües, juntas de dilatación, muros y defensas vehiculares. Así garantizan una mejor circulación y mayor seguridad vial.
Se trata de un punto clave que une norte y sur del Camino de Cintura sobre las vías del Sarmiento, por lo cual unos 180 operarios trabajaron a fin de cumplir con los plazos de obra y dejarlo habilitado para el inicio del ciclo lectivo. También recuperaron las columnas de alumbrado, hubo recambió el sistema de luminarias a LED, realizaron tareas de demarcación horizontal y también se colocaron tachas reflectivas en el eje central.
De esta forma, la puesta en valor de la Ruta 4 tiene un nivel de avance que supera el 85%: sólo resta finalizar alrededor de mil metros cuadrados de asfalto en Cañada de Juan Ruiz y Rosas, instalar nuevos refugios y luces LED, tareas de pintura de columnas de alumbrado y señalización a lo largo de todo el trayecto.
