Nuevo revés para Raúl Othacehé

Tras una asamblea, su hijo dejó de ser rector de la Universidad del Oeste. Para evitar la destitución, intentó tomar el edificio. Qué dijo Menéndez.

El hijo de Raúl Othacehé, intendente de Merlo hasta diciembre del año pasado, fue desplazado de su cargo de rector en la Universidad Nacional del Oeste (UNO) luego de una asamblea de docentes y alumnos que se realizó en medio de gritos, agresiones y hasta un insólito intento de toma del edificio para resistir la destitución.

De este modo, un viejo cacique del PJ bonaerense pierde injerencia en un ámbito académico al que, según sus detractores, manejó desde el primer día como «una caja de la política».

Envuelto en graves denuncias y con problemas hace dos años para entregarles los títulos a los egresados, en la noche del viernes el hijo de «el Vasco» buscó tomar control del edificio de la UNO. Llegó al lugar junto a varios hombres que intentaron cambiar las cerraduras de distintas oficinas administrativas para, según señalan sus detractores, impedir la realización de la asamblea que trataría su desplazamiento.

Entre los alumnos y docentes que estaban en el lugar se encontraba Marcelo Ducrós, el primer rector de la UNO, que empezó a funcionar en 2009. Como aparentemente «la patota del Vasco» no los dejaba salir, armaron una cadena telefónica para dar aviso a integrantes de las distintas facultades y rápidamente muchos comenzaron a llegar con la intención de «resistir» la embestida de los Othacehé.

Siempre según los testimonios de profesores y estudiantes, la creciente tensión fue generando un grado de violencia tal que la gente que acompañaba al ahora ex rector de la UNO terminó pegándole a una decana.

Cuando llegó la Policía, Martín Othacehé entendió que se tenía que retirar y recién entonces comenzaron a calmarse los ánimos. A la una de la madrugada, todos se habían ido y los efectivos de la Federal convocados por los asambleístas cerraron el edificio.

La quietud, igualmente, duró muy poco. En la mañana del sábado se realizó la asamblea que estaba prevista. Pero no fue fácil. Hubo que vallar el frente del edificio para controlar que sólo ingresaran los asambleístas.

Sin embargo, allegados a Othacehé lograron voltear una valla y pasar a los golpes. Nuevamente, hubo disturbios e incidentes. Juan Bautista Almeida, integrante del Centro de Estudiantes, relató que varios alumnos y docentes terminaron lastimados. Algunos, incluso, debieron ser trasladados en ambulancias para evitar que los agredieran al salir.

Desde la vereda de enfrente, salieron a dar otra versión. Señalan que hubo agresiones por parte de los detractores de Othacehé y que echaron al hijo del ex intendente de la asamblea, a la que califican de ilegal. «Está denunciada porque el llamado a asamblea no cumplió con la forma, ni con los requisitos. Es una injusticia», dijo Hernán Piotti López, secretario académico de la UNO.

«Nosotros no pusimos el vallado y la Policía tampoco», agregó el contador y deslizó que «hay intencionalidad política» del actual jefe comunal, Gustavo Menéndez. «Fuimos golpeados, está todo filmado y vamos a hacer la denuncia policial», adelantó Piotti López, quien aseguró que Raúl «El Vasco» Othacehé «no maneja la UNO».

Más allá de las versiones cruzadas sobre los incidentes, la Policía logró poner orden y a las diez de la mañana se realizó la asamblea: hubo 50 votos a favor de la remoción y apenas cuatro en contra. Al frente de la UNO quedó provisoriamente el vicerrector Daniel Blanco, antiguo hombre del ex intendente, ahora distanciado por el conflicto político en la casa de estudios a la que tendrá que normalizar, para llamar a elecciones en un plazo que no está establecido.

Por otro lado, el secretario académico que responde al rector destituido señaló que están en conversaciones con el ministerio de Educación de la Nación para solucionar la entrega de títulos y destrabar las carreras aún no homologadas.

Poco después de la asamblea, el actual intendente de Merlo, Gustavo Menéndez, celebró la destitución del hijo de Othacehé desde la red social Twitter. «La Universidad del Oeste es libre. Felicitaciones asambleístas, claustros y nuevas autoridades», escribió el dirigente que venció en la interna del FPV de agosto del año pasado a uno de los últimos barones del peronismo bonaerense.

Desde su entorno, además, se ocuparon de salir a aclarar las sensaciones del oficialismo local ante la noticia: «Esto lo vivimos como un triunfo político del nuevo intendente, porque se termina con otra de las muchas irregularidades que encontramos en el Municipio», aseguró un allegado del actual jefe comuna.

La UNO tiene 2.000 estudiantes. Allí se dictan siete carreras. Martín Othacehé había asumido como rector en 2013. Pero fue a fin del año pasado, después de que su padre tuviera que abandonar el Municipio, que la UNO se transformó en una suerte de usina de resistencia para los Othacehé.

Los acusan de haber nombrado una gran cantidad de empleados sin experiencia en el ámbito académico y por irregularidades que derivaron en los problemas para entregar títulos a los egresados.