Posse hizo la apertura de sesiones en un clima preelectoral

Abrió el año legislativo con promesas sobre el Golf de Villa Adelina y el Puerto de San Isidro. Reclamos de vecinos y roces en la tribuna como puntapié de un año clave.

El intendente de San Isidro, Gustavo Posse, inauguró un nuevo período de sesiones ordinarias del Concejo Deliberante convocando a “reencontrarnos en base a las obras, bienes sociales que son de los sanisidrenses”.

El encuentro fue enmarcado por una tribuna colmada de grupos vinculados con la conservación del puerto, del espacio verde en el Golf de Villa Adelina y que enfrentan a Cencosud por los terrenos de la ex OSN.  Llevaron pancartas y una nota dirigida al cuerpo de concejales.

Ante esta diversidad de reclamos, el jefe comunal hizo promesas específicas. “Nos vamos a reencontrar en los próximos meses en la construcción de la nueva etapa del puerto parque”, anunció con los amarristas en la grada.

Asimismo aseguró que “todos juntos vamos a estar llegando a una decisión conjunta, la mejor para San Isidro, respecto del Golf de Villa Adelina”. En este conflicto, que movilizó a  parte del barrio, trabajará una comisión conformada por todas las partes.

“Cada uno desde su lugar hace su contribución”, continuó Posse, antes de anticipar obras que serán concluidas este año. “Nos vamos a reencontrar en la inauguración del túnel de Sarratea. Nos vamos a reencontrar en la ampliación del Hospital Materno Infantil, sobre la calle Haedo, que será el de mayor complejidad médica de toda la región”, invitó.

“Seguirá la extensión de la presencia de patrulleros y de cámaras. Aunque el cuidado primario es de los poderes centrales, ¿qué sería de San Isidro si no hubiera sido el primer municipio en instalar una política de seguridad?”, deslizó.

“Hay un dato objetivo, que no lo podemos negar y se hizo con el esfuerzo de todos, nadie quiere irse de San Isidro, y muchos quieren venir a vivir a aquí”, celebró el intendente. “Faltan cosas, pero en muchos casos este municipio está adelantado 35 años respecto del resto del Área Metropolitana”, remarcó.

A diferencia de otros jefes comunales, Gustavo Posse no dio señales de una nueva candidatura a la Intendencia, aunque el ambiente descuenta que la buscará, y se retiró del recinto sin hacer declaraciones al periodismo local.

Por otro lado, en la barra dieron el presente simpatizantes del oficialismo, que tuvieron un breve pero intenso incidente con los grupos vecinales. El hecho no pasó desapercibido, aunque fue antes del inicio de la sesión, y fue difundido rápidamente en redes sociales. El presidente del Concejo Deliberante, Andrés Rolón, intervino en el momento y por medio del micrófono advirtió: “No me tiembla el pulso si tengo que echar a todos de las gradas”. Tras sus palabras, los ánimos se calmaron. 

ROLÓN: “NO NOS CONDICIONAN”

Tras la inauguración, Rolón sostuvo que los pedidos vecinales “no nos condicionan”. Una nota presentada por los asambleístas pide que los reclamos sean tenidos en cuenta en este año legislativo, fue leída por el presidente en la primera sesión -posterior a la inauguración- y fue derivada a comisiones.

Sin embargo, el titular del HCD consideró, ante la prensa, que las demandas “no tienen ninguna necesidad, ninguna urgencia, son todos temas de agenda que se tratan en este Cuerpo”.

Además, vinculó el clima caldeado en el recinto con la agenda política en un año de elecciones. “Se pretendió generar en este lugar lo mismo que en otros”, en relación a la Asamblea Legislativa, que tuvo a maltraer al presidente Macri. Ante esto, Rolón aseguró que “no me va a temblar el pulso para que San Isidro tenga la institucionalidad que merece”.