El presidente Mauricio Macri encabezó en la Residencia Presidencial de Olivos una conmemoración del 25 de Mayo, en la que compartió un tradicional locro en un almuerzo junto a integrantes del gabinete nacional, funcionarios y representantes de distintas organizaciones sociales, escolares y vecinos de la zona.
A la mañana, en la Catedral Metropolitana, el arzobispo de la arquidiócesis de Buenos Aires, cardenal Mario Poli, abogó en el Tedeum porque argentinos e inmigrantes tengan «techo, tierra y trabajo» y llamó a la dirigencia a «crear espacios» en los que «las ideas superen a las ideologías para encontrar acuerdos razonables y duraderos». En ese contexto, llamó a no temer frente a las estadísticas y bregó por «paz, pan y trabajo».
Luego, la comitiva fue hasta la Plaza de Armas en Olivos, donde fueron armadas mesas y se improvisaron asientos con fardos de alfalfa. En lugar fue servido el tradicional locro, acompañado por empanadas criollas y pastelitos de dulce de batata como postre, y se sirvieron bebidas gaseosas, jugos y vino.
Como corresponde a la fecha y al menú, el almuerzo fue amenizado por un conjunto folklórico que cantó y mostró destrezas de malambo.
Entre los comensales, según se informó oficialmente, se encontraban presentes la vicepresidenta Gabriela Michetti; ministros, secretarios y el jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, con miembros de su gabinete.
Entre otras representantes de organizaciones social asistieron miembros de las Cooperativas de Viviendas Quilmes; Grupo Comunitario Blanca Nieves; Fundación Margarita Barrientos; Ositos Cariñosos; Fundación Manos Abiertas; Comedor Comunitario Pamperito; Años Felices; Fundación Convivir; Centro Comunitario Copitos, entre otros.
También gente de la Fundación Obras de San José; Años Felices; Fundación Ayudemos a Crecer; Fundación Convivir; Asociación Civil Niño Jesús; Asociación en Defensa de Nuestros Derechos; Fundación las Otras Voces y Fundación Manos Abiertas, entre otras.
Además, el presidente decidió invitar a participar del encuentro a un grupo de vecinos de la Quinta Presidencial, que en muchos casos era la primera vez que trasponían los muros de la residencia presidencial, y escolares de establecimientos de Vicente López y de Hurlingham.
El su rol de anfitrión, Macri sirvió el primer cucharón de locro, para lo que utilizó como cuenco un zapallo asado y ahuecado, adornado con una cinta argentina, y se lo sirvió a Elvira Laje, una integrante de un centro de jubilados que la semana pasada cumplió 100 años.
No estuvo presente Margarita Barrientos, quien según explicaron allegados a la dirigente social se quedó en Los Piletones, para supervisar la preparación del locro que se sirvió en ese comedor social, donde Michetti estuvo por la tarde.