En las elecciones bonaerenses, dos ex intendentes de la Primera Sección volvieron a “jugar” en los distritos en donde gobernaron hasta hace poco tiempo. Por un lado, Gustavo Posse, de San Isidro, se puso al frente de la campaña de Acción Vecinal San Isidro es Distinto, espacio que con boleta corta obtuvo más de 15 puntos, por lo que sumaría en diciembre dos bancas. En total tendrá cuatro.

De esta manera quedó reflejado el respaldo que conserva el ex jefe comunal, quien no oculta su intención de volver a la Intendencia. Incluso, el sitio Nuevo Norte Digital publicó que “en distintas mesas del distrito se repitió la misma escena, vecinos que entraban al cuarto oscuro buscando votar a Posse, pero que no encontraban su nombre en la boleta”. No sabían que había que buscarlo al final de la nómina, como suplente de consejero escolar.

Otro ex intendente que no le quita el ojo al poder de Hurlingham es Juan “Juanchi” Zabaleta, quien participó de las votaciones con la lista de Somos Buenos Aires, propuesta que a nivel seccional no movió la aguja.

Pero, en el plano municipal, como primer candidato a concejal, se desmarcó y llegó al 16,5 por ciento, por lo cual obtiene dos bancas. Mientras el futuro de Somos es una incógnita, Juanchi ya felicitó al gobernador Kicillof por la contundencia del voto de Fuerza Patria.

Zabaleta está enfrentado con el jefe comunal camporista, Damián Selci, quien lo reemplazó durante el tiempo que fue ministro de Desarrollo Social. Desde ese momento, nunca cesaron los enfrentamientos políticos. Y espera su revancha.