El viernes pasado, el reclamo vecinal por la inseguridad se trasladó al edificio municipal. Vecinos de Caseros sur asistieron a la sesión del Concejo Deliberante; más tarde, familiares y allegados de Roberto Floresta, el carpintero asesinado por motochorros, protestaron en el hall, donde hablaron primero con el presidente del HCD, Sergio Iacovino, para luego reunirse directamente con el intendente Diego Valenzuela.
En el recinto el debate subió de temperatura cuando desde la oposición hicieron mención al crimen de Floresta. En la barra exhibían carteles relacionados con el tema. Desde Cambiemos asumieron que las medidas que está tomando la nueva gestión aunque son un paso adelante no logran frenar este tipo de delitos.
Por su parte, Iacovino – estuvo también el presidente de la Comisión de Seguridad, Martín Jofré – fue el primer receptor del enojo del hijo, sobrinas y vecinos del carpintero, quienes expresaron el hartazgo por la inseguridad que vive la zona, cercana al barrio Carlos Gardel. Pidieron medidas urgentes vinculadas con más patrullaje y la instalación de cámaras. La situación se destrabó cuando el jefe comunal atendió personalmente dichas demandas.
LO ASESINARON «MOTOCHORROS» EN CONFUSO EPISODIO
Roberto Floresta, un carpintero de 51 años, recibió al menos dos impactos de bala – en el pecho fue mortal – cuando hizo frente a motochorros que unas versiones dicen que intentaron reducirlo y otras, que iban a robarle a una joven que estaba en la parada del colectivo.
El hecho ocurrió cerca de las 22 del último miércoles, en la esquina de Francisco Cocchiararo y Martín de Alzaga, Caseros sur. Floresta en ese momento llegaba en la camioneta de su hijo junto a su esposa, que entró corriendo a la casa; aunque fue llevado al Hospital Carrillo, no pudo resistir el ataque.
Los asaltantes hirieron también a la joven, que fue trasladada de urgencia al Hospital Posadas.