La foto de hace un mes, difícil que se repita.

Aunque Alberto Fernández y Horacio Rodríguez Larreta acordaron una reunión para el viernes, en Olivos, la escalada en torno a los últimos anuncios para contener los contagios de Covid 19 dejó huella entre los funcionarios de Nación y de la Ciudad de Buenos Aires. Cruces en los cuales participó también, y de forma virulenta, el gobernador Axel Kicillof.

Después del discurso del Presidente, el jefe de Gobierno porteño brindó una conferencia de prensa para anunciar qué medidas adoptará la Ciudad de Buenos Aires en base a las nuevas restricciones sanitarias. En esa línea, explicó que desde el gobierno nacional no le consultaron las decisiones y le pidió la reunión al primer mandatario.

Deslizó que desde su gobierno siempre buscaron el diálogo y la concordancia para tomar medidas conjuntas que aplaquen la pandemia. «Esta forma de trabajo se rompió”.

Junto con el jefe de Gobierno porteño participaron el vicejefe de Gobierno, Diego Santilli; el jefe de Gabinete, Felipe Miguel; la ministra de Educación, Soledad Acuña; el ministro de Salud, Fernán Quirós, y el secretario de Transporte y Obras Públicas, Juan José Méndez.

En ese marco, sostuvo que las decisiones epidemiológicas de su gabinete son «en base a datos, no en base a anécdotas o fotos», y aclaró que «este problema no se resuelve tomando decisiones intempestivas», en referencia a la segunda ola del coronavirus. «El Gobierno está tomando medidas más restrictivas porque no cumplió con el plan de vacunación y las vacunas que prometió», disparó.

Uno de los puntos más resistidos de las medidas es el vinculado con la suspensión por dos semanas de las clases presenciales. Sobre este tema, Larreta comentó, «le pido al Presidente reunirnos hoy mismo y hacer todo lo posible para garantizar que los chicos vayan a las aulas».

«El aula más peligrosa es la que está cerrada. El miedo no nos va hacer cambiar las conductas», alentó. Para el referente de Juntos por el Cambio, la decisión del gobierno nacional es inadecuada y no tiene justificación sanitaria.

Redondeó la idea: «Estamos en desacuerdo con suspender las clases presenciales. Sabemos las consecuencias de las escuelas cerradas. Quince mil chicos abandonaron las escuelas».

Respecto a la polémica sobre la intervención de las Fuerzas Armadas, Rodríguez Larreta se mostró crítico. «Rechazamos totalmente toda participación del Ejército, de las Fuerza Federales en las calles de la Ciudad. Esto no está coordinado». Asimismo recordó que «la Ciudad es tan autónoma como el resto de la provincias. Vamos a hacer todo lo que esté a nuestro alcance para legitimar esa autonomía».

En cuanto a los números de la pandemia mencionó que «la última semana los contagios aumentaron de 1900 a 2600», y agregó que en el sector público las camas están «al 53% de su potencial». Además, testearon hasta el momento a 3 millones de personas y ya vacunaron al 90% de los trabajadores de salud y al 99% de los mayores de 80 años. Aunque advirtió que la Ciudad se está por quedar sin vacunas.

FRANCOTIRADOR

Por su parte, el gobernador bonaerense, Axel Kicillof, defendió horas después en una conferencia de prensa las nuevas restricciones anunciadas por el presidente Alberto Fernández para mitigar los efectos de la segunda ola de coronavirus en el país. El mandatario provincial dejó fuertes críticas contra el Gobierno porteño: «Larreta no le puede mentir así a la gente en la cara».

En la rueda de prensa afirmó que la provincia de Buenos Aires «adhiere a las medidas que dictó el Presidente» y destacó que cuando se pide «coordinar» acciones con la Ciudad de Buenos Aires es porque «el virus no reconoce un lado u otro de la General Paz».

«El AMBA vuelve a fase 2», remarcó el gobernador, al tiempo que repitió las medidas que dispuso Fernández, agregó una nueva, «actividades recreativas y deportivas (amateurs) al aire libre sólo hasta 10 personas».

Entre los dardos dirigidos a uno de los referentes de JxC, Kicillof señaló: «Hoy, en la Ciudad de Buenos Aires estalló el sistema privado de salud. Se acabaron las camas del sistema privado, que atiende al 80% de la población de la Ciudad; pero cuando Horacio Rodríguez Larreta habla de camas, sólo habla del sistema público».

«Me gustaría que se pongan en contacto estos genios de la epidemiología con el Reino Unido. A mí no me van a correr con que a nosotros no nos importa la educación», agregó sobre la suspensión de las clases presenciales.

Y siguió: «Larreta no le puede mentir así a la gente en la cara. En la Ciudad creen que están inventando la pólvora», dijo y añadió, «a veces pienso si no sería mejor que venga directamente Macri a discutir con nosotros. Pensamos que Larreta era diferente porque tenía responsabilidades de gestión, pero finalmente es igual a Bullrich y a Macri».

Ayer, el presidente Fernández anunció que no se podrá circular entre las 20 y las 6 en el Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA); la suspensión de las actividades sociales, culturales, deportivas, religiosas y recreativas en lugares cerrados, el cierre de comercios desde las 19 y la suspensión presencial de clases en los tres niveles educativos.

La suspensión de las clases se producirá a partir del lunes próximo y hasta el 30 de abril, mientras que las medidas con impacto en el resto de las actividades regirán desde el viernes, y también por dos semanas. En tanto las actividades gastronómicas funcionarán en modalidad de «entrega a domicilio» desde las 19.