Hace más de dos semanas y todo el día, frente a la Quinta de Olivos, en la sumamente transitada Avenida Maipú, hay un acampe de trabajadores de la Unión de Transportistas de Buenos Aires (UTBA). A la fecha, poco y nada avanzó el reclamo de quienes trasladan personas con discapacidad.

Cecilia Salato, secretaria y tesorera de la entidad, y Agustina Soler, en diálogo con Guía de Noticias comentaron en dónde están parados. “Estamos acá desde el 10 de noviembre, con la intención que Alberto Fernández escuche nuestro pedido, porque ya agotamos todas las instancias”, señaló Salato.

Por el requerimiento de una actualización del nomenclador y pago de deuda provincial ya pasaron por la Agencia Nacional de Discapacidad, la Superintendencia de Salud, Pami y Provincia por el Programa Incluir Salud.

Las entrevistadas por este portal, que reclaman en representación de más de 150 familias afectadas, informaron que en la última semana quisieron entregar un petitorio por día hasta ser recibidos, para que el Presidente esté al tanto, pero no se los reciben y les dicen que vayan a Casa Rosada.

“La realidad es que con la pandemia le dimos la mano al Gobierno con no pedir aumentos”, reconoció Salato, y agregó que desde marzo, “salimos a trabajar porque somos personal esencial, en esta época trasladamos todo lo que las instituciones envían, comida, medicamentos”.

Mientras tanto, el martes pasado determinaron un aumento de tarifa para el sector, en el cual el Estado junto con los entes financiadores definió 10 por ciento que correrá desde marzo de 2021. “Nosotros pedimos el 100 por ciento. Es lo que necesitamos para seguir poniendo en marcha la camioneta”, remarcó. Hoy, por el traslado pagan el kilómetro 27, 9 pesos, cuando el combustible está con el último incremento a 73 pesos el kilómetro.

Por su parte, Soler destacó que “el tema de la discapacidad es sensible. El Gobierno nunca se hizo cargo”, y deslizó que las autoridades ni siquiera saben la cantidad de personas con discapacidad.

“Pensábamos que con este gobierno iba a ser distinto, se suponía que tenía más sensibilidad, que era popular. Pero nos damos cuenta que es el último tema en la agenda”, concluyó.