Marzo fue un mes de conflictividad gremial en el municipio de San Martín. Las posiciones de uno y otro lado parecían dirigirse a un callejón sin salida. El intendente Gabriel Katopodis firmó el aumento salarial por decreto y la delegación del Ministerio de Trabajo dispuso la conciliación obligatoria poniendo un freno a las acciones gremiales.
Hoy, el panorama es distinto. Guía de Noticias entrevistó al funcionario del Ejecutivo a cargo del tema, José María Fernández, el secretario de Gobierno y Seguridad. La charla partió de la base que los trabajadores municipales cobraron la semana pasada los haberes de marzo con un incremento promedio del 27% en el básico.
Hubo una situación conflictiva con los gremios, ¿cómo están hoy las conversaciones?
Lo que les planteábamos a los sindicatos era que estábamos de acuerdo con que el aumento debía estar por encima del 30 %, pero entendíamos que en el primer semestre el municipio no estaba en condiciones de hacer ese esfuerzo, porque se debía medir en la recaudación, además, el impacto de las medidas tomadas a nivel nacional. Sí nos comprometíamos a hacer un esfuerzo grande en el primer semestre y sentarnos luego a conversar juntos cómo estaba evolucionando la recaudación y tomar una decisión de dar un porcentaje más de aumento.
Estaba establecido el 5 %, ¿puede llegar a ser ese el número en el segundo semestre?
Era una chance, pero todo eso voló por el aire cuando los gremios decidieron no sentarse a la mesa de negociación. Fueron al Ministerio de Trabajo, perdiendo de vista la ley (que está suspendida por 180 días). Por eso tomamos la decisión por decreto, haciendo el mayor esfuerzo posible. Nos presentamos en el Ministerio con una nota y la grilla, explicando que la paritaria no estaba vigente, que era todavía una facultad del Ejecutivo municipal, aunque habíamos tomado la decisión de consensuar. Además, trabajamos desde noviembre en el estatuto y diferentes condiciones laborales, y eso prestaba a confusión, y algunos muchachos entendieron que la paritaria estaba vigente. Desde que está en vigencia la conciliación obligatoria nos sentamos a conversar con la mayoría de los gremios y fuimos firmando actas con cada uno de ellos, si bien el aumento estaba ya otorgado se volvió a poner sobre la mesa la posibilidad de seguir conversando mejoras que no solamente tengan que ver con la remuneración, sino con las condiciones laborales.
Sobre cuatro gremios, firmaron con tres…
Sí, falta el de Personal Jerárquico y Profesional. (…) Cuando en el reclamo salarial empiezan a mezclarse cuestiones políticas pasa que con algunos de los sectores se hace más difícil dialogar, lo que no quita que vamos a tratar de lograrlo. Estamos dispuestos a escuchar, pero no estamos dispuestos a que se mezcle el reclamo gremial con una intencionalidad política.
En definitiva, la prueba de fuego fue cómo reaccionó el trabajador cuando cobró.
Algunos de los sectores cometieron el error de insistir, aun sabiendo de qué magnitud era el incremento, con que era del 20 % y que no decíamos la verdad. Cuando el empleado municipal cobró y vio el recibo se dio cuenta que algunos gremios no habían sido claros a la hora del mensaje.