Macri y la habilidad de gambetear preguntas incómodas

En su primera conferencia de prensa de 2017, el Presidente fue interrogado acerca de varios temas de actualidad: Arribas, Trump, FMI; inundaciones, fútbol y el puntaje de su padre.

En la conferencia de prensa que ofreció en la Casa de Gobierno, Mauricio Macri arrancó con el tema de las inundaciones en Buenos Aires y Santa Fe – no descartó declarar la emergencia para la zona -, para luego abrir el abanico con las preguntas de los periodistas acreditados.

En el aspecto económico no coincidió con los indicadores que hablan de un retroceso en varias actividades. En ese sentido dijo que en 2017 la obra pública ha tomado velocidad y seguirá tomándola en obras hídricas, puertos, energía, ferrocarriles, lo cual posibilitarán el desarrollo económico.

Consultado sobre conflictos que ponen en peligro fuentes laborales, sostuvo que “hace varios meses crece el empleo en la Argentina, crecen miles de puestos de trabajo, se crean mes a mes” y remarcó que desde el Estado se ayuda para que ninguna empresa cierre.

Sobre las proyecciones del Fondo Monetario Internacional (FMI) respecto del crecimiento, del 3%, el Presidente respondió: “Esperamos crecer más que esto; vamos a volver a crecer pero durante 20 años sostenidos”. De lo contrario “no va a haber solución en la Argentina”, porque en el país hubo varias etapas de crecimiento, de 4 o 5 años,  y después se cayó. Para esa suba sostenida, dijo, “hay que apostar al esfuerzo y no al atajo”.

Un periodista le pidió que haga una autocrítica, al concluir el primer año de gobierno. “Tenemos que hacer más,  ante tanta necesidad más allá del punto de partida, de un país quebrado, sin energía, estancado sin crecimiento durante cinco  años”, y agregó que también quiere “más dinámica, seguir empujando” para lograr que “los argentinos puedan construir el país que soñamos hace tanto años. Tenemos un enorme futuro si nos comprometeremos decir la verdad, no al atajo, a la chicana”.

Las declaraciones de su padre, Franco Macri, tuvieron su eco en la rueda de prensa. Consultado si son necesarios más de cuatro años de gobierno, el mandatario consideró que “esta tarea no se agota en 4 años”, pero advirtió que “falta mucho” para hablar de 8 años. Y no falto la chanza respecto a los cinco puntos con los cuales fue calificada su gestión, «el 5 de mi papá, teniendo en cuenta lo severo que es, es como un 10».

Otros temas que el Presidente sorteó con bastante comodidad a pesar de ser espinosos: Gustavo Arribas, a quien avaló; Joe Lewis, “no entiendo el porqué de esta sistemática búsqueda de agredirlo. Es alguien que eligió a la Argentina, que no nos pide nada, que da trabajo”, señaló; Donald Trump, confió en que habrá por delante un “enorme camino a recorrer juntos” en una relación de mutuo beneficio.

Además, estuvo presente el tema Milagro Sala. “Es un caso de Jujuy con un federalismo y Poder Judicial de Jujuy y está tramitando causas donde ha cometido delitos”, indicó. Y referido al caso de Alberto Nisman señaló, «esperamos que en un tiempo razonable se sepa la verdad».

Hubo asimismo consultas sobre políticas migratorias. «Por falta de acción no podemos permitir que el crimen siga eligiendo a la Argentina como un lugar para venir a delinquir”, aclaró Macri. Sobre el debate por el régimen penal juvenil anticipó su posición, “hemos ido sufriendo un avance sistemático del delito, la violencia, que nos obliga a entender que tenemos que reconocer que eso nos pasa y que nos tenemos que sentar a debatir cuáles son las mejores soluciones».

Le fue mencionado el escándalo de los Panamá Papers, a lo cual el jefe de Estado respondió, “yo colaboré y me encantaría que el juez en un momento dado diga que todas esas denuncias que me hicieron son mentira”.

Por último, lo que significó un trago amargo para unos cuantos, la confirmación del fin indeclinable de Fútbol para Todos. “Nosotros no vamos a seguir poniendo plata. No sé cómo los dirigentes no previeron esta situación terminal”, disparó directo a la AFA y a los clubes.