Andrés Rolón, flamante presidente del Concejo Deliberante, se sentó en la banca y pidió la palabra para dar una suerte de discurso inaugural. “En estos meses generaremos lazos de confianza, de diálogo, y tendremos todos un único objetivo que son los vecinos de San Isidro”, prometió a todos sus pares.
En medio de una fractura interna en el Cuerpo, el nuevo hombre de confianza del intendente Gustavo Posse presidió su primera sesión y el oficialismo empezó a marcar la cancha. Lo que las palabras de Rolón esconden es que para el gobierno municipal llega el momento de recuperar el terreno perdido desde diciembre. Esto se empieza a ver en el terreno de las Ordenanzas. También se adivina en una revisión de los espacios de poder interno, como los cargos y las comisiones.
Por caso, un ejemplo podría ser el del pasado miércoles con la aprobación del proyecto de declaraciones juradas redactado hace un tiempo por el Departamento Ejecutivo. Esta normativa obliga a los funcionarios a presentar sus declaraciones en consonancia con la Ley de Transparencia impulsada por la gobernadora Vidal.
Resultó aprobado por 11 votos positivos, de las 9 manos del possismo más las 2 del Frente Renovador, bloque que hasta mayo le votaba en contra, y el 30 de mayo abonó al cambio de autoridades.
Por la negativa levantaron la mano 10 ediles. Fueron los 5 de ConVocación, 2 de Unidad Ciudadana (Celia Sarmiento se tuvo que retirar antes de la votación), Carlos Castellano y los 2 representantes del PJ. Ausentes estuvieron el macrista Rodrigo Seguín y Carlos Juncos, que viajó a Rusia.
De esta manera naufragó el proyecto de Declaraciones Juradas motorizado por Castellano -vecinalismo. La propuesta incluía la creación de una Oficina Anticorrupción autárquica que controle los números del Ejecutivo.
En virtud del nuevo esquema, el possismo pretende reestructurar las comisiones de trabajo para encauzar sus proyectos. En particular, pone el ojo en la influyente comisión de Labor Parlamentaria. Este espacio está presidido por los vecinalistas gracias a su acuerdo con el anterior presidente del Concejo. Los miembros de este partido temen que Posse teja acuerdos para dejarlos sin ese preciado resorte de poder interno.
Una espada del bloque oficialista sostuvo ante la consulta de Guía de Noticias que “buscamos acuerdo en torno a las comisiones, ya lo habíamos manifestado en abril”. La bancada massista es la única sin participación y quiere obtener su lugar.