Gustavo Spalletti, subsecretario de Asuntos Legislativos e Interjuridiccionales, dependiente de la Secretaria General de la Municipalidad de Tres de Febrero, en una entrevista en el programa Alta Data – Class FM, miércoles 16, 30 horas – analizó la crisis económica política nacional, y la gestión de Diego Valenzuela, a la que se incorporó hace pocos meses.

“Fui convocado por el intendente, yo trabajé en espacios de la oposición, esto habla un poco de la amplitud de Diego. Entiendo que la instancia que vivimos los argentinos implica hoy una toma de posición, el espíritu del ahora nos invita a saber de qué lado estamos; hay claramente dos grandes rumbos, uno es estar del lado de sostener los valores y nuestra república o el otro es una opción que tiene como modelo Venezuela, Irán, que es la disolución de la democracia por lo menos en los términos republicanos como nosotros los conocemos. Eso invita a que no hay más margen para terceras posiciones e implica una toma de posición”.

¿Cuál es tu expectativa ante los cambios en el gabinete del gobierno nacional?

-A mí me da la impresión que ya nadie tiene ningún tipo de expectativa. Creo que el mercado, que somos todos nosotros, es claro en el sentido de la situación de vacío de poder que existe; esta cuestión contra natura que tiene una vicepresidenta que ostenta los votos y un Presidente que se encargaron permanentemente de vaciarlo de atributos de poder, hace este desorden, como consecuencia un desorden en lo económico.
En ese sentido, no hay ninguna cuestión de expectativa, donde el maquillaje o las formas quieran resolver una cuestión que es de fondo. Así que me parece que es una exageración plantearse expectativas cuando lo que hay es un vacío absoluto de poder, una cuestión netamente de corte político, donde un gobierno desde su comienzo hasta ahora no tiene ningún tipo de rumbo, ni de plan, ni nada.

¿Decís que no hay ningún plan que rija la gestión Nación, Provincia, municipio que de cierta certeza?

-No, está claro, no hay un rumbo, no hay un plan y a partir de ello lo que hay es un quiebre con la confianza; la economía es una construcción de confianza que está quebrada con la sociedad, con los mercados. Pero ya pasó a lo largo de la historia, no es la primera vez (…). Todos esos momentos terminaron muy mal, lo más saludable sería que este gobierno cumpla todo el mandato.

¿Adelantar elecciones?

-No, no hay porqué adelantar elecciones, la cuestión es sincerar dónde está el poder en este gobierno, los factores de poder buscan hablar con el poder que no está en el presidente de la Nación, su propia coalición se encargó de limarlo, deslegitimarlo y de vaciarlo de sus atributos.

¿Pero el poder dónde está, en Cristina Fernández?

-Sí, Cristina es la jefa de un sector de la coalición golpista, en ese sentido, ahora en términos de coalición a lo largo de la historia, quise decir, cada vez que esto sucedió tuvo consecuencias nefastas. Básicamente. para los argentinos y por supuesto para la salud de la democracia.

Desde el Frente de Todos dicen que la desestabilización proviene de Juntos por el Cambio y de sectores, por ejemplo, como el campo.

-Sabemos que el kirchnerismo, me refiero dentro de la coalición hay un sector que impulsa el proyecto, las ideas y la ejecución, este sector tiene como matriz siempre la responsabilidad en el otro, nunca asume una responsabilidad. Hoy se encuentra en la profundización de esta estrategia de buscar desesperadamente un responsable, y en este momento por supuesto no encuentran el rumbo, no hacen pie y buscan siempre un culpable, en este caso la oposición. Somos todas personas de sentido común, sin embargo, las declaraciones de Grabois diciendo que correría sangre por las calles o la vicepresidenta de la Nación deslegitimando los atributos presidenciales no contribuyen a la tranquilidad que necesita la población en un momento tan difícil.

En el Frente de Todos insisten con que ya se calmaron los ánimos, que las cosas están un poco mejor…

-Es una de las cuestiones que impide, muchas veces, la construcción mínima de un consenso, un diálogo, porque si no se ponen de acuerdo entre ellos es muy difícil hablar con otros sectores. Por ejemplo, se encuentra en cada uno de los temas que tienen posiciones diametralmente opuestas, esto se percibe y profundiza la angustia e incertidumbre de todos nosotros.

Quedan los dos polos políticos que se sostienen hace unos cuantos años, si no hay lugar para terceras posiciones…

-No queda lugar en un momento que vemos que se avasalla la Justicia, reconocemos que en hay problemas y que muchas veces tiene que ver en términos domésticos, que nos pasa con el tema de la seguridad, que muchas veces se entra por una puerta y se sale por la otra, pero no es esa la preocupación que tienen, por la que están preocupados es por la Justicia Federal, por la cuestión de impunidad (…)

¿Cuál es tu evaluación del trabajo que hace cada espacio en el distrito y qué expectativas ves para el año que viene?

-Hoy, en Tres de Febrero la gestión de Diego Valenzuela trasciende lo que es un poco la mirada de Juntos, y es lo que me invitó a dar el paso. Diego creció, tiene una mirada cada vez más madura, de hecho, él lo reconoce en estas nuevas iniciativas que lo pusieron en el centro de la escena, no solamente distrital, sino provincial y con los medios nacionales, de poner el trabajo en el centro de la escena, él mismo reconoce que es producto de haber aprendido y corregido.
En ese sentido, el Diego Valenzuela que los vecinos acompañaron en las urnas habla de un dirigente que ya es ejemplo en la provincia de Buenos Aires y que todos nosotros, por lo menos en mi caso, decidí sumarme para ayudar, porque reconozco la gestión.

¿Entonces, cuenta con proyección provincial el intendente?

-Por supuesto que sí, pero no lo digo yo, esto lo dice el reconocimiento que tiene Diego en cada uno de los dirigentes nacionales, provinciales, por iniciativas, como puso acá el trabajo en el centro de la escena, una persona que impulsó en el Concejo Deliberante modificaciones a la Ordenanza de producción y trabajo, la eliminación de tasas, favorecer al comerciante, a las Pymes, de poner un centro de la economía popular, es decir estar ocupado y preocupado de que no estemos condenados a vivir una generación más de planes, sino cómo salimos de esta situación.
(…) En cambio encontrás una agenda del Frente de Todos que está alejada de la necesidad de la gente, donde no se representa a las grandes mayorías, por supuesto que es valioso, pero una agenda que tiene solamente como eje vertebral un lenguaje inclusivo, o algunas cuestiones segmentadas o de un colectivo, me parece que habla de un espacio que tiene una agenda que no está ligada a la cotidianidad y necesidad de la gente, sino más parecida a la del Partido Obrero.

Sos un hombre que viene del peronismo, ¿cómo viviste el 26 de julio, con todo lo que significa Evita para el PJ?

-Creo que el peronismo de Tres de Febrero hace mucho tiempo que se alejó de los barrios. El emergente de las organizaciones sociales es un emergente de un peronismo que se corrió de los barrios y que se refugió en una burocracia partidaria alrededor de una lapicera, hoy esa agenda que se necesita la ocupa Diego Valenzuela, por eso hay mucho peronista que lo elige. Creo que el FdT representa un sello completamente vacío, donde los peronistas no se sienten representados, por un espacio político que romantiza la pobreza, que no habla de la movilidad social ascendente. Así que en ese sentido el día de Evita lo sinteticé parafraseando a Cristina “si Evita lo viera”, con 50% de pobreza no hay nada para festejar”.