Tras varias horas de debate, con una interrupción por el reclamo de trabajadores cesanteados, los concejales de Morón aprobaron un Presupuesto para este año por 2.108 millones de pesos. La votación finalizó con 16 manos por la afirmativa (Cambiemos, Frente Renovador y Partido Socialista) y 8 negativas del Frente para la Victoria.
El cálculo de gastos y recursos contempla una fuerte inversión en seguridad, salud e infraestructura. En cuanto al área de seguridad – está vigente la emergencia – pasó de una partida de 53 millones a superar los 150 millones. Por otro lado, en salud tendrá el 25% de los recursos de libre disponibilidad. En lo que respecta al área de Obras y Servicios Públicos, la inversión es del 32% del total del presupuesto, llegando a los 527 millones.
En su alocución de más de hora y media, la presidente del bloque oficialista, Analía Zappulla, señaló, “este Presupuesto refleja la voluntad de cambio que pidieron los vecinos en Morón. Se generan aquí las bases de política económica para transformar el distrito”.
El titular del bloque FpV, Hernán Sabbatella, fue el primero en defender la gestión saliente. Fue al hueso: “Le mintieron a los concejales y a los ciudadanos sobre el estado de las cuentas e inventaron una deuda tres veces mayor a la que muestra el presupuesto. A tal punto es así que los propios concejales del Frente Renovador pidieron derogar la emergencia económica”.
Agregó que “la deuda del año 2016 no es de 170 millones como sostuvo el oficialismo. Es de 62 millones y representa sólo el 2,96% del presupuesto. Es apenas un 0,96% superior a la del ejercicio anterior, lo habitual en los circuitos administrativos, y no un endeudamiento extraordinario por parte de la gestión anterior». Además, dijo que dejaron el municipio con un saldo de libre de disponibilidad de caja y bancos de casi 47 millones.
A su turno, Jorge Laviuzza, del massismo, manifestó: “El presupuesto brinda gobernabilidad. La evaluación requería más tiempo para ser debatida como se debe. Aun así vamos a acompañar en líneas generales. No tenemos críticas en cuanto a los porcentajes dirigidos a cada área. Espero que con la herramienta que le estamos dando al Ejecutivo se hagan las correcciones que se necesitan para mejorar la vida del vecino”.
RECLAMO DE TRABAJADORES
No fue una sesión fácil. Los ánimos venían ya caldeados por cruces de dardos entre Cambiemos y el kirchnerismo, pero la cosa empeoró cuando un grupo de municipales cesanteados irrumpió en el recinto e interrumpió abruptamente el encuentro legislativo.
Trabajadores de la Subsecretaria de Promoción de Trabajo y Economía Social y del área de Niñez reclamaron a los ediles por la pérdida de sus puestos. A su vez, la tensión llevó a cruces violentos entre representantes de las bancadas del PRO y de Nuevo Encuentro, espacio que canalizó el reclamo, motivo por el cual Zappulla les endilgó sin vueltas un uso político del tema y reiteró que el FpV “sabotea” al nuevo gobierno comunal.