El intendente y precandidato Diego Valenzuela votó en el colegio Nuestra Señora del Carmen de Santos Lugares. En el día de su cumpleaños, apeló a todas sus cábalas: llevó facturas para los integrantes de la mesa en donde sufragó, usó la misma ropa que en elecciones anteriores y almorzó en familia en Ciudad Jardín. La jornada termina en el búnker (salón de fiestas) de Villa Bosch.
El jefe comunal de Tres de Febrero llegó acompañado por la senadora seccional Daniela Reich. Y contó en rueda de prensa que su hijo Lucio votó por primera vez y, a la vez, fue fiscal en una escuela de Caseros.
“En lo personal siento un gran apoyo”, dijo cuando regía aún la veda electoral. Comentó asimismo que las expectativas eran “siempre las mejores para una jornada democrática”. Además, hizo un repaso por los vaivenes de la construcción de un voto popular, “para todos y todas”: “Vengo con mucho optimismo a escuchar las voz del pueblo”.
Evaluó asimismo con la vista en octubre, “para mí es una elección bisagra en la historia nacional, define el rumbo del país, un ciclo político para los próximos 30 años”.
Consultado por el desarrollo de los comicios, Valenzuela contó que en términos generales fueron con normalidad. No obstante aclaro que “siempre hay pequeñas cosas, picardías, que ojalá nos lleve alguna vez a reflexionar sobre una reforma del sistema electoral, la boleta sábana quedó anticuada; se puede discutir también la pertinencia de una PASO”.
“Tenemos que ser respetuosos de la legalidad, la veda, y preservar la decisión de la gente. Algunos creen que vivimos todavía en la etapa anterior y que las picardías hacen diferencia”, redondeó.