Tasazo de Alberto Descalzo pasó la primera prueba en el Concejo

La preparatoria de otra modificación fiscal - impositiva fue aprobada por 15 votos de oficialistas y opositores. Acuerdos políticos y números en rojo.

El tratamiento del aumento de tasas en la sesión del miércoles del Concejo Deliberante de Ituzaingó no tuvo mayores sorpresas; la Ordenanza preparatoria que se pondrá a consideración – el próximo 9 de septiembre – de la Asamblea de Mayores Contribuyentes resultó aprobada por amplia mayoría. Quizá lo llamativo fue la tibieza del debate, sin contar que varios ediles acompañaron la iniciativa del Ejecutivo a la vez que criticaron el manejo local de las finanzas.

Fueron 15 votos a favor, 4 en contra de Sergio Crego, quien conformó el monobloque Cambiemos Ituzaingó; Julio Díaz y Carolina López de Cambiemos PRO; y Esteban Vallarino del socialismo. El referente de Libres del Sur, Nahuel Segovia, optó por la abstención. El mayor incremento previsto es en Seguridad e Higiene, con 20 por ciento, lo cual impacta en comercios e industrias; hay, además, un retoque en algunos ítems del ABL. Estas medidas serán como darle una aspirina a un enfermo grave: el oficialismo prevé recaudar hasta fin de año 5 millones de pesos y tiene declarado hasta hoy un déficit de 60 millones.

La sesión, presidida por Juan Carlos Roumieux en lugar de Pablo Descalzo que cubría a su vez la licencia del jefe comunal, comenzó con el relato del miembro informante, Jorge Esquivel. “Gobernar implica asumir riesgos”, justificó, y circunscribió la medida a un marco económico macro adverso.

Julio Díaz lo refutó. “La realidad no sólo se debe a la actual coyuntura, sino a una deficiencia de gestión de varios años”, indicó, y estimó que un nuevo aumento de tasas podría traer recesión aparejada.

Por su parte, Gastón Di Castelnuovo, flamante presidente del bloque Cambiemos, apuntó a una contradicción; remarcó que mientras que el descalcismo critica el tarifazo, en el municipio ajusta tasas. Sin embargo, los tres ediles del espacio acompañaron el proyecto: “Más difícil (que aprobarlo) va a ser explicarle en unos meses a los vecinos por qué no funciona la administración municipal”.

Segovia contó su disyuntiva. “El oficialismo no hizo de la transparencia su mayor virtud”, deslizó, pero cargó las tintas también contra la gestión nacional de Cambiemos. Explicó que eligió la mesura ante la contundencia de las cuentas en rojo, “el Estado municipal vive una situación compleja y yo no voy a poner palos en la rueda”, concluyó.

No fue la posición de Vallarino, quien aportó  algo de calor al encuentro – y cruzó chicanas con Esquivel que le espetó, “desde su trinchera tira bombas” -. “Es un exceso un segundo aumento en el año”, dijo, y recordó que “los bienes y servicios que brinda el municipio son muy precarios”. Consideró que “el intendente nos pide un cheque en blanco”.

Larrache, que había tenido una larga intervención cuando trataron previamente los tarifazos, consideró que una cuestión no es equiparable con la otra, y manifestó, “en Ituzaingó estamos hablando de algo razonable”.

Sobre el final, el massista Roberto Rocha blanqueó el panorama de gran parte de la oposición: “Quedamos en la disyuntiva de elegir entre Guatemala y Guatepeor”. Agregó que “la situación no está para especular”  e hizo mención al riesgo de un desfinanciamiento del municipio. Pero, por las dudas, ante el gesto de compartir posibles costos políticos, pidió responsabilidad al gobierno de Alberto Descalzo.