IADEPP trabaja en el derecho a la identidad

La entidad contribuyó en Campana para que dos mujeres, madre e hija, accedieran a sus DNI, con lo cual fueron incluidas formalmente en la sociedad.

“Cuando me contacto con Jhoanna veo la singularidad del caso”, dice Axel Cantlon, representante de IADEPP en Campana, y añade que “ella tenía una partida de nacimiento sin los nombres de los padres, otorgada por el Juzgado de Menores del Departamento Judicial de Zárate-Campana”.

Jhoanna Sosa llegó a contactarse con el IADEPP (Instituto Abierto para el Desarrollo y Estudio de Políticas Públicas), mediante las Hermanas Pasionistas del barrio de San Cayetano, una congregación católica que trabaja en este barrio humilde de Campana, con una partida de nacimiento en la mano con sus datos, pero sin conocer sus orígenes.

Por su parte, la hija de Jhoanna tampoco poseía documento ni partida de nacimiento, ya que la había tenido en su casa por su condición de indocumentada y no pudo ser internada, excluida de los sistemas de salud y los establecimientos públicos.

Para lograr una solución, Cantlon se hizo presente en el juzgado interviniente, solicitó el desarchivo de la causa y pidió que se oficie una solicitud al Registro Nacional de las Personas (RENAPER) para que Johanna pueda obtener el DNI que nunca le fue otorgado.

Existe un procedimiento muy importante en este trámite: constatar que la persona es quien dice ser. La situación es delicada teniendo en cuenta los contextos, los mayores de 12 años tienen que pasar por un juicio de inscripción tardía acompañados de su padre o madre. En el caso de Jhoanna esto fue imposible y al no haber sido inscripta al nacer, su caso tendría mayor detenimiento.

La jueza revisó el expediente para aclarar la situación y, posterior análisis de varios meses, pudo entregar a IADEPP el oficio dirigido al RENAPER para completar el trámite que lleve a Jhoanna a lograr su DNI.

A su vez comenzó la inscripción fuera de término de su hija, Noelia. Pasaron los exámenes médicos de certificación en hospitales públicos que exige este tipo de trámites y la joven también fue documentada.

Así, el 4 de marzo, y luego de una larga jornada en el Registro Nacional donde fueron tomadas sus huellas dactilares para confirmar la identidad, Jhoanna, junto con su hija, accedieron a su primer Documento Nacional de Identidad. Luego de mucho padecer dejaron de ser invisibles para la sociedad.