El gobernador de la provincia de Buenos Aires, Axel Kicillof, encabezó la apertura de sesiones ordinarias en la legislatura bonaerense y a lo largo de su discurso se mostró muy crítico de la gestión del presidente Javier Milei. Condicionó su firma en el Pacto de Mayo y consideró que Argentina «está siendo sometida a un extravagante experimento».

“No quiere achicar el Estado, sino desintegrarlo, y lo reconoce», remarcó sobre el libertario. Sin embargo, apuntó que este objetivo «tropieza con un primer y determinante obstáculo, ni más ni menos que la Constitución Nacional», a la vez que destacó la forma republicana de gobierno.

En su mensaje, el gobernador mencionó las medidas impositivas que tomó «para sustituir los fondos» de Nación. En ese sentido, dijo: “Elaboramos y aprobamos democráticamente en esta legislatura una ley impositiva cuyos ejes fueron la suba de alícuotas a sectores concentrados de la economía, beneficiados por la política económica de Milei».

A esto sumó «la adopción del impuesto a los rendimientos de instrumentos financieros, la implementación de un anticipo extraordinario sobre Ingresos Brutos para 254 grandes empresas altamente concentradas, el incremento solidario en el inmobiliario para menos de un 10% de las propiedades de mayor valuación fiscal, mientras para las restantes se sostiene por debajo de la inflación y la actualización de los impuestos patrimoniales».

En cuanto al esperado pronunciamiento sobre la convocatoria a firmar el “Pacto de Mayo”, Kicillof le pidió a Milei que «deje de extorsionar a los gobernadores para que aprueben leyes que lastiman los intereses de sus provincias».

Sobre el llamado “refundacional” en Córdoba, el gobernador aclaró que “si se trata de encuentros para fotos y marketing, arranquen nomás si no llegamos».