El secretario interino de Economía y Finanzas de Morón, Jorge Álvarez Holmberg, se presentó ante el Concejo Deliberante para dar cuenta de la administración del Servicio Alimentario Escolar, municipalizado en enero de este año. En nombre del Ejecutivo respondió por más de tres horas las consultas opositoras por la adquisición de los alimentos, la composición de las empresas adjudicatarias, la calidad y la eficiencia del servicio. Lo acompañó el subsecretario de Legal y Técnica, Cristian Herrera, quien está ya ducho en esta cuestión de rendir cuentas en el HCD.
Pero, la interpelación se desdibujó en un capítulo más de la disputa entre Cambiemos y el FpV. El oficialismo prefirió reclamar a Nuevo Encuentro que pruebe versiones de comida podrida en escuelas. “¿Qué día y en qué establecimiento los chicos recibieron alimento en mal estado?”, preguntó la edil Analía Zappulla, presidente de bloque. Por su parte, el sabbatellismo evadiendo esos cuestionamientos, intentó mostrar que el municipio armó una licitación privada para favorecer empresas amigas.
Cansados del escenario polarizado y sosteniendo que el objetivo de la sesión se había cumplido, los bloques del Frente Renovador y el socialismo se retiraron anticipadamente. “Estamos hartos de escuchar boludeces”, exclamó Jorge Laviuzza, presidente de la bancada massista.
CUESTIONAMIENTOS AL SISTEMA
El secretario de Economía desarrolló un informe sobre las condiciones del Servicio Alimentario Escolar (SAE). “En enero se firmó el acta con el Ministerio de Desarrollo Social de Provincia. El fin es garantizar una prestación alimentaria adecuada a los niños y jóvenes escolarizados en situación de riesgo con los fondos provinciales”, aclaró. Y detalló que “según el Consejo Escolar, teníamos 25 mil raciones diarias, pero nos encontramos que debíamos preparar 35 mil”.
El punto polémico fue la adjudicación del servicio. El funcionario admitió que ante el apremio por el inicio de clases no tenían el tiempo para una licitación pública, por lo cual se implementó una privada. Y se decidió dividir el municipio en 6 zonas con licitaciones respectivas, todas por el monto máximo para ese tipo de licitación: 1,33 millones pesos.
Ante la requisitoria de la bancada de NE sobre la validez de las licitaciones, Holmberg y Herrera reconocieron que se consultó informalmente al Tribunal de Cuentas. Sostuvieron que la relatoría del organismo aconsejó la licitación privada aunque de manera provisoria para luego llamar a una licitación pública. Las empresas adjudicadas por compulsa de precios fueron Bagala S.A, Teylem S.A, Equis Quince y Compañía Integral de Alimentos S.A. Todas con antecedentes en el rubro pero sin radicación en Morón.
Como las seis zonas adjudicadas no tienen un criterio geográfico ni de cantidad de alumnos, Hernán Sabbatella concluyó que “para eludir el procedimiento administrativo conforman seis zonas con los mismos montos licitados”. El presidente del bloque Frente para la Victoria -Nuevo Encuentro sugirió además relaciones entre las empresas por medio de supuestos apoderados compartidos entre dos de ellas.
Por parte del Frente Renovador se plantearon dudas sobre la licitación, la conformación de seis zonas y las características del servicio. A su vez plantearon que se privilegie el Compre Local a través de proveedores moronenses. “Quedaron muchas cosas por responder, nosotros vamos a seguir controlando lo que nos dijeron que iban a hacer los funcionarios”, afirmó a Guía de Noticias Laviuzza.
El edil socialista, Favio Martínez, puso la lupa sobre la ineficiencia del sistema, dado que se comprobó que muchas escuelas recibían más alimentos de los que son capaces de almacenar o preparar. “Noto una falta en la coordinación entre la Dirección de Educación, las empresas y los nutricionistas, según nos informan en las escuelas. Necesitamos transparencia, porque nos llega información que las escuelas no están en condiciones para guardar los alimentos”, reclamó.
Además, sostuvo que la determinación de la gobernadora Vidal de municipalizar el SAE denigra a una institución del voto popular como el Consejo Escolar. Cabe recordar que esta decisión, que alcanzó en una primera etapa a un puñado de comunas, está judicializada.
FINAL BOCHORNOSO
Cuando la sesión se estiró cerca de las tres horas “empezamos a ser testigos de una película donde los anteriores se culpaban con los actuales, y los actuales a lo anteriores. Película de los que no somos staff. Y que quieren hacer resonar en todo el resto del país”, declaró este medio Jorge Laviuzza para quejarse de la polarización macrismo-kirchnerismo.
Por eso, “creyendo que el temario de la sesión había concluido, nos sentimos ofendidos y nos levantamos, porque han querido desnaturalizar y bastardear la interpelación”, explicó. “Ambos sectores son la perversa cara de la misma moneda”, cerró.