Macri confrontó con los K en su paso por el Congreso

En su balance del primer año de gestión, el Presidente hizo menciones a la herencia. Habló de pobreza, educación y transparencia. Vidal dio inicio también a las sesiones ordinarias.

Con un balance de su primer año de gestión y una agenda con hincapié en la educación, la economía y la transparencia, Mauricio Macri brindó un discurso de una hora frente a la Asamblea Legislativa para inaugurar las sesiones ordinarias en el Congreso. Tras aludir al kirchnerismo como una «década de despilfarro y corrupción», el Presidente retomó la iniciativa política en el año electoral. «Superamos lo más difícil de esta transición y el país está cambiando: la Argentina se está poniendo de pie», aseguró.

«Siempre supimos que el camino iba a ser difícil, por los que se resisten, los que ponen palos en la rueda. Tenemos que poner el hombro y tenemos que cambiar las cosas en serio», indicó el jefe de Estado ante los legisladores.

La previa estuvo marcada por la tensión ya que el kirchnerismo preparó carteles alusivos a Milagro Sala, al «ajuste» en la ciencia y otros con las consignas «Presidente offshore». «Yo te vi bajar las jubilaciones» y «Yo te vi endeudar», fueron algunas de las frases que decoraron las bancas opositoras.

Entre los invitados se lo vio al ex presidente Eduardo Duhalde, sentado entre los ministros y en el palco reservado para los jueces, se ubicaron los cinco integrantes de la Corte Suprema. No asistió Alejandra Gils Carbó y desde la Procuración aseguraron que no fue invitada. Otro ausente fue el diputado Sergio Massa, de viaje por Israel.

EDUCACIÓN Y POBREZA

En una crítica velada al kirchnerismo, Macri enfatizó: «Hay menos relato y más verdad». «No creemos en los liderazgos mesiánicos, hay que aportar soluciones, dialogando y trabajando juntos», dijo. El Presidente señaló que se trazaron «cien prioridades» pero enfatizó: «Mi principal preocupación y prioridad es reducir la pobreza, gobernar es la tarea humana de acompañar y cuidar a quienes necesitan del Estado».

«La presencia del Estado se traduce en obras de infraestructura social. No podemos permitir que haya 12 millones de argentinos viviendo en villas, sin agua ni servicios básicos. Hablo de esto cuando digo que estamos sentando bases: identificamos las zonas más críticas y este año vamos a mejorar situación de 384.000 familias», mencionó respecto al índice de pobreza, que supera los 30 puntos.

En medio del conflicto con los docentes, que no logra saldarse por la discusión paritaria, Macri resaltó la importancia de la educación. «Necesitamos docentes formados, motivados y reconocidos, enseñen donde enseñen tienen que poder tener un salario digno».

La temperatura subió cuando se refirió a los gremios y generó críticas posteriores. Tras la interrupción desde una banca, en alusión a amenazas al gremialista, señaló, «no creo que [Roberto] Baradel necesite que nadie lo cuide… les pido una ley que agrave las penas a aquellos que agreden a los docentes».

ECONOMÍA

Macri sentenció que «la inflación estará bajo control». «Es tóxica, destruye el salario de los trabajadores», agregó. Nuevamente con una fuerte crítica al kirchnerismo señaló que a la inflación «la fomentaron y la quisieron esconder». «Nosotros la enfrentamos y hoy está en claro camino descendente», dijo.

El Presidente aseguró que en 2016 «el BCRA cumplió con sus metas» y que el objetivo para 2017 es tener una inflación entre el 12 y el 17%. «Salimos del default, que nos asiló durante 15 años. Eso nos permitió incorporarnos al mundo y tener credibilidad internacional», se jactó Macri y remarcó las medidas de «sinceramiento fiscal y pago a los jubilados».

Macri resaltó al campo argentino como el «supermercado del mundo» y dijo que se registró «la cosecha más alta de la historia del trigo». Respecto a la minería, pidió «encontrar entre todos manera responsable de aprovechar la gigantesca potencialidad minera, cuidando el medio ambiente y favoreciendo a la gente».

El jefe de Estado anunció «el plan más ambicioso de la historia» en materia de Transporte. «En cuatro años, esperamos tener 2800 kilómetros nuevos de autopistas y ya hay 1100 en construcción», manifestó.

ANTICORRUPCIÓN

«La corrupción es un mal que envicia a lo político. Detrás de la corrupción hay familias sin cloacas y tragedias que se pudieron haber evitado como la de Once», lanzó en uno de los párrafos más esperados de su discurso. Y sentenció: «Hoy la obra pública dejó de ser un sinónimo de la corrupción gracias a los ahorros a través de las licitaciones transparentes».

«La corrupción se combate con la transparencia y la integridad» dijo Macri. Cabe destacar que esta mañana quedó imputado por el fiscal Jorge Di Lello por presuntas irregularidades en la adjudicación de rutas de cabotaje a Avianca. «Pedí a la Oficina Anticorrupción que cree un mecanismo para separar mi actuación ante cualquier suspicacia por un potencial conflicto de intereses. Que nadie dude de las decisiones que toma este presidente», dijo Macri.

«Publicaremos dos decretos sobre juicios y contrataciones para la prevención de conflictos de intereses», anunció.

Otro de los reclamos al Congreso fue el debate de la ley de «responsabilidad empresaria». Se trata de un proyecto de responsabilidad penal para personas jurídicas (empresas, asociaciones civiles, fundaciones y mutuales), que fue enviado al Congreso en octubre último. Una advertencia a las empresas de que la lucha contra la corrupción también requiere un compromiso del sector privado.

INSEGURIDAD Y JUSTICIA

El Presidente destacó a los problemas de inseguridad como «las máximas angustias y preocupaciones». Destacó una nueva «estadística criminal» y el envío de las fuerzas federales «a los lugares de violencia». «En Rosario redujimos 20 por ciento tasa de homicidios y en más del 30 por ciento la de robos calificados. En la provincia de Buenos Aires asistimos a 31 municipios con fuerzas federales», dijo.

Aludió a la Justicia con un fuerte reclamo: «Queremos saber qué pasó con el fiscal [Alberto] Nisman y con su denuncia». «La Justicia necesita cambiar, creemos en la Justicia independiente» dijo Macri. Resaltó el programa que fomenta el ministro Germán Garavano de Justicia 2020, para tener un sistema judicial «cercano a la comunidad, moderno, ágil y transparente».

Antes de irse del recinto, Macri levantó y mostró con el brazo derecho un paquete de yerba. Se lo había entregado, en medio del discurso, la diputada María Britez (FpV-Misiones), que se acercó hasta el atril. Era una forma de visibilizar el conflicto de los yerbateros. El Presidente siguió hablando, sin mirarla y recibió el paquete el presidente de la Cámara baja, Emilio Monzó, sentado a su derecha.

VIDAL HIZO FOCO EN EL CONFLICTO CON LOS DOCENTES

La gobernadora María Eugenia Vidal dio esta tarde el discurso de apertura de las sesiones ordinarias en la Legislatura bonaerense, y en ese marco se refirió a las elecciones legislativas, la agenda para el congreso provincial este año y la convocatoria a un diálogo amplio por la seguridad. Algunas de sus intervenciones:

«La agenda de este año será: ley de declaraciones juradas, obra pública, Código Procesal Penal enfocado en la víctima, ley de tierras fiscales y ley de asociación público-privada».

«Este año, un año electoral, tenemos que seguir dando las peleas que hacen falta. No estamos para el aplauso fácil. Esta provincia no soporta más las avivadas. Voy a hacer lo posible para sostener el cambio y voy a pedirle a la gente que nos acompañe con su voto».

«Nos estamos ocupando de la enorme deuda que el país tiene con nosotros. Hubo una pelea que no se dio: la recuperación del Fondo del Conurbano. Otros gobernadores decidieron callarse. Algunos presidentes anteriores también. Nosotros no. Decidimos ir a la Corte y pelear por lo que corresponde. Porque la provincia es la que más aporta al PBI y la que menos recibe».

«Voy a convocar a un diálogo social por la inseguridad. Años de política de seguridad que fueron cambiando con los gobernantes nos han puesto en ese lugar. Se llevaron adelante más de 30 planes diferentes. Por más esfuerzos que hagamos, si no tenemos una política de largo plazo, los resultados van a ser los mismos».

«No va a hacer sólo un debate de los políticos y la Justicia, vamos a sumar a las iglesias y a las organizaciones sociales para que la conversación sea amplia y profunda».

En uno de los segmentos más duros y extensos de su discurso, la mandataria provincial destinó críticos mensajes a los dirigentes de los gremios docentes.

«A los dirigentes les digo que el camino que eligieron hace unos días no es el mejor. No es fácil sostener el diálogo cuando la intencionalidad no es clara. No es fácil sostener el diálogo cuando nos dicen que aun acordando la paritaria no van a empezar las clases. Fue una decisión arbitraria», dijo.

En otro tramo, la gobernadora disparó desde el atril: «Sé que entre los dirigentes sindicales hay personas honestas. No sean funcionales a los que responden solo a sus propios intereses políticos». A diferencia de Macri, que dijo horas antes que «Baradel no necesita que lo cuiden», Vidal no personalizó en ningún gremialista.

Además, apuntó directo a los maestros: «Sé que su reclamo es justo. Sé que están preocupados por la situación de sus escuelas. Las diferencias que tenemos con los gremios no tiene que ver con lo que queremos, sino con lo que podemos», remarcó. Y remarcó que planifica que “el salario no pierda contra la inflación”.