El Movimiento de Integración y Desarrollo (MID) de la provincia de Buenos Aires tuvo un punto de encuentro en Vicente López, donde es anfitrión el concejal Oscar Ponce. El itinerario del diputado nacional Eduardo Falcone, el presidente del MID provincial, Fernando Mascetti, y el vicepresidente, Daniel Loyola, incluyó una foto con la intendenta del PRO Soledad Martínez.
Esa visita tuvo el trasfondo del aún fresco recuerdo del escándalo en la Cámara de Diputados, en el cual Oscar Zago se fue a las manos con el libertario Lisandro Almirón, tema que Falcone abordó en diálogo con periodistas.
Las imágenes fueron elocuentes. Almirón agredió, gritó, hasta que Zago reaccionó y abandonó su banca. «Mientras estábamos con ese despelote, la diputada Tolosa Paz pidió una moción que era para voltear las facultades delegadas, que nosotros no escuchamos».
El legislador repasó esa jornada: «Ya habíamos votado la emergencia para Bahía Blanca por unanimidad. Presentamos un proyecto para constituir una comisión investigadora por el criptogate, todo se giró a comisión, menos juicio político al Presidente, que el peronismo pidió que se tratara en el recinto, y votamos en contra».
Casualmente, el punto a tratar antes del tumulto fue la constitución de la Comisión de Juicio Político, que el año pasado cuando los tres diputados del MID formaban parte de La Libertad Avanza, y Zago era el presidente del bloque, se propuso a Marcela Pagano. Esa comisión «quedó en un limbo, porque el presidente de la Cámara – Martín Menem – nunca la convalidó».
Con el inicio de las sesiones ordinarias, el tema se impuso nuevamente en la agenda. «Los propios diputados de LLA no querían aprobarla. Entonces nos pedían que nos levantáramos de las bancas para no dar quórum. Nosotros pedíamos una solución política. Pagano quería ser la presidenta, pero Menem desconoció el acta en su momento, y en el pleno de la Cámara ahora levantaron la sesión».
En la charla con la prensa, deslizó también, «creo que la presidencia de la Cámara tendría que ordenar a su propio bloque, porque querían que resolviéramos su interna».
Falcone concluyó que «si son sensatos deberíamos recomponer el diálogo político. Los vetos y demás los sostenemos los aliados, no sería muy inteligente seguir peleando». Y apareció la referencia electoral, que en definitiva es el nudo de la discusión actual: «LLA no inició con nosotros ningún diálogo. Dicen que se van a presentar solos, tienen la confianza exagerada que ganan cómodos».
