El presidente del Concejo Deliberante de Tres de Febrero, Sergio Iacovino, recibió a Guía de Noticias en la oficina provisoria que ocupa hace varios meses, hasta que finalicen las remodelaciones en el área en donde está su despacho. En una entrevista en la cual se combinaron temas institucionales con cuestiones partidarias, una de las espadas del PRO en el distrito dejó varias definiciones.
En principio, su balance del primer año de gestión en el Concejo. “Me resultó muy positivo. En lo personal era toda una experiencia, un desafío grande”, reveló, y añadió, “desde el punto de vista institucional hubo un trabajo muy fuerte. Votamos 43 Ordenanzas, el triple del promedio de los últimos años. Tuvimos buen diálogo entre todos los bloques”.
“Recompusimos la presencia del HCD dentro del esquema político del municipio y que sea un lugar en donde estén los temas que interesan al vecino”, concluyó el repaso. Citó como pendiente terminar con las reformas edilicias.
¿Cree que siendo este un año electoral habrá una aceptable convivencia política en el Concejo? ¿resultará más complicado llegar a consensos?
Tenés situaciones personales de la mitad de los integrantes del HCD que tienen que saber cuál va a ser su futuro político, con lo cual eso ya genera algún tipo de inquietud. Después tenés los posicionamientos dentro del espacio político donde esté cada uno de nosotros. La conjunción de estas variables hace que uno intuya que a partir de determinada fecha, que toma más calor el clima electoral, las preocupaciones giren más para un lado que para otro. Creo que durante la primera etapa del año se podrá seguir trabajando igual que en 2016, después va a jugar cómo venga la elección, qué nos pida la gente.
¿Qué mapa político existe hoy en Tres de Febrero?
Fortalecimos aquello que era una alianza electoral, que muchos pensaron que no llegábamos siquiera a octubre de 2015. Lo consolidamos como una estructura de gobierno y nuestro deber es seguir en esa línea este año. 2017 es una prueba de esa consolidación.
No me gusta opinar de otros espacios, pero veo en el peronismo varias opciones distintas, algunos responden a referencias políticas que tienen más que ver con el gobierno anterior y otras tratan de expresar una nueva manera de ver al peronismo.
Difundieron encuestas en las cuales la imagen positiva del intendente Valenzuela ronda el 60 por ciento con una brecha amplia con la imagen negativa. ¿Eso les da una pauta de votos?
Uno espera que sí, se trabaja para eso. Si la imagen del intendente es buena y es buena la gestión, uno espera que el vecino nos siga acompañando con el voto en octubre.
¿Juegan en contra medidas como el aumento de tarifas?
Muchas veces, las políticas nacionales tienen impacto en el voto local. El ciudadano de Tres de Febrero es bonaerense y argentino, por lo cual las políticas nacionales y de Provincia impactan en el humor de todos nosotros. Pero me parece vislumbrar que hay un sector de la política opositor que pretende hacer notar medidas del gobierno nacional para ver si capitaliza desde lo distrital; eso es subestimar al votante. Obviamente que las tarifas impactan, porque sincerar la economía tiene un costo. Pero si ves hacia dónde querés ir y por qué hacés esto, te das cuenta que es el buen camino.
LO QUE VIENE
Luego de difundir los resultados de la auditoría sobre las excepciones otorgadas en la última etapa del curtismo, anunciaron que el Concejo tratará una reforma al Código de Ordenamiento Urbano. ¿Cómo manejarán el tema?
Había un mito y la forma de confirmarlo era investigando el tema. Se hizo una auditoria con personas ajenas al municipio para que sea objetivo, y efectivamente se comprobaron varias irregularidades, que derivaron en sumarios administrativos.
De cara a lo que viene tenemos el deber de contar con un nuevo COU. Claramente, el vecino necesita una modificación. Hay que correr la improvisación, la discrecionalidad y el negocio espurio, y analizar cómo queremos planificar Tres de Febrero a 20 años.
La Comisión de Desarrollo Urbano convocará a vecinos, especialistas, desarrolladores, para conocer su opinión (…).
¿Tienen previsto el tratamiento de la Rendición de Cuentas para antes del comienzo de las sesiones ordinarias?
La gestión anterior tenía la costumbre que cuando comenzaba el período ordinario el tema ya había sido votado; si nosotros podemos este año conversar con todos los bloques para mantener esa práctica, se hará igual. Estamos muy tranquilos con que en la documentación del año pasado no hay inconvenientes. Esperamos que en los primeros días de marzo la documentación esté acá.
Ahí pueden surgir las primeras pujas del año con la oposición…
La Rendición de Cuentas parece ser un momento propicio para marcar alguna diferencia, pero hay que considerar también la responsabilidad institucional, no es algo que meramente me gusta o no me gusta. Si está bien hecha y no hay irregularidades, como estoy seguro que pasará, no tendrían que oponerse porque sí. Podés marcar tu disidencia con la gestión, una mirada crítica, pero el hecho institucional merece tener un paraguas de lo que es la coyuntura política.
Hay trascendidos que se avecina un cambio en la presidencia del bloque Cambiemos, hoy a cargo de Claudia Mormont, ¿es algo definido?
Nuestro bloque fue una experiencia política interesante. Los seis venimos de orígenes distintos y arrancamos el año pasado conociéndonos. Hicimos un trabajo muy bueno en acompañar las políticas del Ejecutivo y marcar además nuestra propia agenda.
Está en revisión qué vamos a hacer este año, pero me lo tomo con calma, no es algo que genere problemas. Es algo que veremos los seis. No hay una cuestión de cartel.