Sin la presencia de Hugo y Pablo Moyano – y la asistencia del díscolo Palazzo de los Bancarios -, y a puertas cerradas, el Comité Central Confederal, máximo órgano ejecutivo de la CGT, sesionó por espacio de casi dos horas en instalaciones del gremio ferroviario La Fraternidad. Allí se dispuso avalar lo actuado por el consejo directivo «con la ronda de discusiones, debate y negociación que se llevan a cabo con el Ejecutivo».
Al término de las deliberaciones, el triunvirato conformado por Carlos Acuña, Héctor Daer y Juan Carlos Schmid, brindó una rueda de prensa en el hall del Teatro Empire, ubicado a escasos cien metros del Congreso.
Daer aclaró que «se resolvió establecer claros límites en los temas pendientes para encontrar resultados» a la agenda que plantea la CGT, y «tratar temas que para nosotros son inclaudicables, como los referidos a la integralidad de los convenios colectivos de Trabajo, a la ley de contrato de Trabajo, a la seguridad social, al modelo sindical, y de seguir llevando adelante una postura crítica sobre un modelo económico que no da resultados».
Ante la consulta sobre si la ausencia de Los Moyano podrían ser impedimento para un probable acuerdo con el Gobierno, Schmid respondió categóricamente: «La delegación de Camioneros estaba presente, y es cierto que no concurrió el secretario gremial de la CGT (Pablo Moyano), pero esa delegación avaló lo anunciado por Daer, por lo cual no queda ninguna duda de que esa organización acompaña lo decidido».
Acerca de en qué instancia del diálogo están con el Gobierno, Daer sostuvo «tuvimos una reunión donde se han tirado tres temas: el primero, la formación profesional, que queda por profundizar y donde hacemos la advertencia que no vamos a tolerar un mercado laboral de pasantes».
En segundo término nombró al «blanqueo» de trabajadores informales «que tampoco tenemos desagregado al día de hoy, y qué significa, y eso para nosotros es fundamental porque no puede haber blanqueo si no compartimos la potestad de fiscalizar aquellos nichos y actividades que tienen trabajadores en la informalidad». Como tercer tema hizo referencia a un «monitoreo de la situación de las organizaciones sindicales que están intervenidas».
El sindicalista de la Sanidad también aprovechó para manifestar que «hay una sobreactuación sobre hechos que son utilizados intencionalmente para deslegitimar una representación, porque los temas de la Justicia, son temas de la Justicia, y nosotros vamos a plantear hoy y siempre que el bien protegido es la representación de los derechos de la totalidad de los trabajadores que no queremos que sean vulnerados».