Por indicación del intendente de Ituzaingó, Alberto Descalzo, y materializado el 16 de junio a través de dos cartas firmadas por Hugo Rojas, subsecretario de Seguridad, el municipio le retiró a la policía local móviles y equipos de comunicación. Acción que debe ser leída en un contexto político de tironeo con la administración de María Eugenia Vidal. Pero que poco tiene en cuenta las necesidades del vecino.
Se trata de 7 Fiat Siena y 3 camionetas Ford Ranger que fueron retirados en las últimas horas de la dependencia ubicada en Ventura Alegre y Blas Parera, así como 60 equipos de Nextel que habían sido entregados por la Comuna. Funcionarios descalcistas, molestos por la pérdida de influencia en la toma de decisiones de la Provincia, deslizan que la quita de colaboración podría extenderse a la provisión de combustible de patrulleros.
Desde el municipio nunca estuvieron conformes con la remoción del jefe policial Jorge Castillo, lo cual ocasionó chispazos entre Descalzo y el gobierno bonaerense. De hecho, no está claro si quedará firme la designación del nuevo jefe, Leandro Maidán. Y, según averiguó Guía de Noticias, por estas horas se multiplican las reuniones para destrabar el conflicto.
Desde la oposición marcaron su postura. El dirigente de Cambiemos Gabriel Pozzuto, al frente del Pami en Ituzaingó, apuntó que “el intendente, en una disputa con la Provincia y en busca de protagonismo, nos deja como rehenes de la inseguridad. En vez de ponerse los pantalones largos y actuar como responsable del municipio, decide hacer todo lo contrario y retira los recursos para que la policía local pueda seguir haciendo su trabajo”.
El massista Roberto Rocha mencionó en su muro de Facebook: “Me sorprende semejante medida. Si costaba ver patrullaje en algunos barrios, ¿estos días quien va a patrullar? Quiero imaginar que la Policía habrá tomado medidas para proteger a los vecinos. Muchachos, siéntense en una mesa y resuelvan el problema y no dejen a los vecinos sin seguridad”.
